domingo, 19 de noviembre de 2006

Imagina


Escribir no solo es un acto de comunicación, a veces tambien te sirve para recordar, cosas en las que ya no crees, cosas que ya no escribirias, cosas que a veces quisiesemos olvidar. El tiempo, la distancia te da otra perspectiva...



Imagina que sales de alguna discoteca de Santiago, la noche se va disolviendo y los primeros obreros se dirigen a trabajar. Todo esta desolado, las calles son atravesadas solo por tus pies, caminas rápido porque el frío penetra tus huesos y porque sabes que en la oscuridad puedes perderte. Lo sabes porque muchas veces has visto esta escena desde la acera del frente.
El invierno ha dejado secuelas en tu cuerpo, estas enfermo y no puedes dejar de toser, además estás cansado, naturalmente hoy te has divertido mucho, pero sientes que ahora no podrás correr y eres demasiado frágil para siquiera pensar en defenderte. Si solo no estuvieras enfermo, correrías como lo haces siempre, pero sabes que sería inútil.

Como imaginas, no tienes muchas posibilidades, tienes que resignarte. Piensas que solo llevas dos mil pesos en tu billetera, que jamás te ha agradado la idea de usar un celular y que podrás comprar otra chaqueta, sin embargo, tienes miedo. Sabes, mejor dicho nunca sabes, con lo que te puedes encontrar.
Mientras caminas tiras al suelo tu navaja. Pequeña y sueva apenas logras oír cuando golpea el suelo. Ibas a dejar caer el celular. Pero es demasiado grande, ellos lo notarían. Solo te has deshecho de tu arma blanca porque piensas que entre más indefenso estés, mayores serán las posibilidades de piedad. Puede que ellos solo ataquen si se sienten amenazados.
Te detienes, observas como atraviesan la avenida. Ya han cruzado el bandejon central, solo te quedan algunos suspiros. Te has detenido porque has visto, en aquel restaurante que acabas de pasar, una posibilidad de salvarte. Han apurado el paso, ya no queda más tiempo para pensar así que das la media vuelta y corres. Llegas hasta la pared del restaurante, miras hacia atrás y los ves corriendo hacia a ti, puedes distinguir las navajas que llevan sus manos. En ese instante comienza a toser y sentir que ya no puedes seguir respirando, pero sacas tus ultimas fuerzas para trepar hacia el techo.
Estas aterrado, le temes al dolor, le temes a la muerte y le temes a ellos. A pesar de todo, aún amas la vida.
Te pones de pie y esperas que uno de ellos intente trepar para patearlo con todas las fuerzas que tienes, lo golpearas con todo el odio que has guardado y disfrutaras ver la expresión de dolor que reflejara su rostro al caer.
Pasan algunos segundos, pocos, pero los suficientes para convencerte de que no subirán, así que te acercas hacia la orilla.

- ¡Si te mueves disparo!-

El grito te perturba un tanto, pero te quedas quieto y con tus ojos apuntando hacia el revolver. Te siguen gritando, te ordenan que bajes pero te quedas mirando. Por alguna razón las armas de fuego te fascinan. Este ultimo es el tercer ultimátum, pero parece que ahora sí van a disparar. No lo hacen, parecen haber reflexionado que el ruido de la detonación alertaría a quienes ahora duermen.
Uno de ellos comienza a trepar, retrocedes un poco solo para hacerles creer que intentaras huir. Cuando ves su cabeza, procedes tal como lo habías planeado. Sientes como los huesos de su nariz se han quebrado, escuchas el golpe seco de su cuerpo al caer, Sin embargo, no lo has disfrutado como lo haces siempre. Esta vez has recordado que cuando niño jugabas al fútbol.
Vuelves al borde del techo, solo para observar a aquel agonizante cuerpo desangrarse. En la noche la sangre no es roja, sino negra. Nosotros lo sabemos.
Ellos están confundidos por algunos momentos, pero vuelven ha percibir tu sombra, y vuelves a ser amenazado por el mismo revolver.
Uno, dos, tres cuatro, cinco, seis son los disparos que salen del revolver, pero ninguno de los proyectiles ha encontrado tu carne. En ningún momento has quitado la vista del cañón. Comienza a llover. Ellos huyen dejando abandonado al desgraciado que has pateado. Ellos huyen y te sientes aliviado, piensas que estas a salvo.
Intentas bajar pero tus piernas están cansadas y tu agitada respiración te hacen pensar que lo mejor sería descansar ahí unos momentos. Te sientas y sin que lo vayas notando vas perdiendo un poco la noción de tu cuerpo y comienzas a dormir, al principio te preocupas, pero luego te relajas, porque sabes que no están ellos. Sin embargo, has olvidado que sigues enfermo.
Son las siete y abajo comienzan a servir los primeros desayunos. Son las siete y la enfermedad ya te ha carcomido los pulmones. Has despertado pero no te puedes mover, has gritado pero no te puedes oír. Has dejado de respirar pero no te puedes morir. No quieres morir.
Dos días mas tarde, el dueño del pequeño negocio sube al techo. Esta preocupado, no se explica el putrefacto olor que ha espantado a sus clientes.

Siento lastima de la gente que muere en los techos. Siento lastima de la gente que muere sola.






... y así eran los pequeños vasos de agua en los que solía ahogarme, eran pequeños, demasiado pequeños, ahora me parecen estupidos y a veces hasta egoistas. Es cierto, las perspectivas cambian, aunque a veces creo que siempre he pensado así, pero antes las imagenes tenían su encanto más allá de toda esas emociones baratas y de mal gusto. Día de nostalgia, de leer las viejas tonteras escritas ( por lo menos las que quedaron), día de darse cuenta que las cosas cambian.

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jueves, 2 de noviembre de 2006

Y la Libertad?


El concepto de Neoliberalismo ha sido una de las formas con las cuales se suele aludir eufemísticamente al capitalismo post industrial que nos toco vivir. Pero cabe preguntarse ¿Cuál es la libertad a la que alude dicho Neoliberalismo?, pregunta que por lo demás vuelve ha revitalizarse cada cierto tiempo y que en esta ocasión ha surgido en relación a la decisión del gobierno de USA de levantar una muralla a lo largo de su frontera con México para de esta forma detener la inmigración ilegal a sus territorios. Lo curioso es de la situación es que los mismos que derribaron el muro en Berlín en nombre de nuestra libertad son quienes ahora levantan nuevas murallas. La muralla de seguridad en Cisjordania y ahora la construcción de este nuevo muro en la frontera de México, develan una de las tantas contradicciones de la moral dominante.

Las corrientes migratorias, por lo menos en tiempos de paz, son fenómenos estrechamente ligados a cambios económicos y a la redistribución geográfica de las fuerzas de producción, ejemplo de esto es la migración campo-ciudad producto de la aparición de la industria a gran escala. Refiriéndose al panorama actual Marcel Claude señala que tras el complejo proceso de alianzas, fusiones e intercambio de acciones entre empresas para operar en los mercados globales, existen unas 35 mil sociedades multinacionales con más de 150 mil filiales, que acaparan la tercera parte del comercio internacional. Como resultado, se produce el desplazamiento de las actividades productivas hacia las áreas geográficas que presentan más ventajas, como menores costos laborales, incentivos fiscales y relajadas normas ambientales, entre otras”. La diferencia está que la migración campo-ciudad era posible ya que la libertad económica era acompañada de la libertad de desplazamiento (que en definitiva le dio forma a nuestras ciudades), en cambio en nuestro modelo económico globalizado la creciente libertad de los capitales (manifestada a través de TLC´s, multinacionales y los “capitales golondrinas”), no ha sido acompañada por un aumento en las libertades de las personas puesto que aun persisten las fronteras nacionales a pesar dichos limites parecen disolverse para los movimientos financieros.

Todo límite, toda frontera tiene la finalidad de dividir, de separar, de distinguir entonces ¿Qué es lo que separa este muro? Según lo publicado por los mismos Mexicanos de La Jornada: La inmensa muralla que levanta Estados Unidos en la frontera con México corresponde a la decisión de reprimir "a como dé lugar" ("as necessary") a los millones y millones de mexicanos y mexicanas sin trabajo que pretendan salir de la ratonera de inseguridad, insalubridad, analfabetismo y miseria en que muy bien saben que van a convertir a México. Se estima que alrededor de 300.000 ilegales ingresan a USA cada año y que los trabajadores indocumentados bordean los 12.000.000. Dejando de lado la paranoia y la amenaza del terrorismo, la razón con que se justifican las restricciones a la inmigración se basa en la creencia de que los indocumentados quitan puestos de trabajo a los estadounidenses y por tanto producen una reducción de los salarios de los trabajadores menos calificados. En el caso Mexicano la contradicción entre las libertades económicas y las libertades personales esta dada por la firma en 1994 del TLC entre ambas naciones. Según los datos de la CEPAL en 1994 el desempleo en México era de un 12% y el nivel de pobreza alcanzaba a 21%, el año pasado estas cifras eran de un 30% y 50% respectivamente, a pesar de que las exportaciones y la inversión extranjera aumento en un 400% en dicho periodo.

La pesadilla mexicana se constituye en la contraparte del sueño americano en la medida que esta último se construye sobre la primera. Demás esta decir que dicha contraparte, que dicha pesadilla somos y la vivimos todos aquellos que estamos del otro lado de la frontera, de los que formamos parte del tercer mundo, los subdesarrollados, la barbarie, demás está decir también, que nuestra oposición no debe ser a la libertad sino a las libertades a medias que nos quieren vender. Las divisas son libres, las personas no.




“Mi voto es contra los acuerdos de libre comercio y el ALCA porque ellos promueven una sociedad de consumismo, individualismo y materialismo, donde los ricos se vuelven más ricos y los pobres más pobres. Al final de cuentas, ¿qué queremos? ¿Queremos vivir felices, gozando de relaciones humanas basadas en la solidaridad, la amistad y la convivencia? ¿Queremos preservar y cultivar nuestros valores y nuestras costumbres festivas, en una sociedad más justa? ¿Queremos defender nuestra soberanía y nuestra libertad? ¿O queremos simplemente ser tratados como consumidores, embrutecidos y anestesiados por la publicidad?”
- Alianza Social Continental




Más info:

10 razones por las que Mi Voto es contra el ALCA, el Libre Comercio y la Deuda Externa : http://www.asc-hsa.org/article.php3?id_article=175

Inmigración Parte II: Efectos de la inmigración en los trabajadores, salarios y empresarios:

http://www.universia.edu.uy/index.php?option=com_content&task=view&id=1559&Itemid=45

La globalización financiera
http://www.attac.cl/edicion/index.php?option=content&task=view&id=313&Itemid=2
*La imagen del principio es un trabajo de Bansky sobre el muro de seguridad en Cisjordania

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